La Ruta del Triángulo del Norte de Coahuila (III Parte)

En Esta última parte de la fantástica ruta del triángulo del norte de Coahuila conoceremos los pueblos mágicos de Parras, Viesca y Arteaga.

Hablar de Parras es hablar de sus templos, casonas coloniales y por supuesto de sus fantásticas vitivinícolas; pero sin más preámbulos iniciemos este viaje…

Ubicado al sur de Coahuila, este Pueblo Mágico recibió originalmente el nombre de Villa de Santa María de Las Parras en virtud de su comprobada fertilidad y la abundancia de parras silvestres que prosperaban en la región. A partir de 1868, cambia su nombre al de Parras de la Fuente, en honor al abogado saltillense Juan Antonio de la Fuente, quien defendió la soberanía mexicana en contra de los invasores franceses durante el Segundo Imperio.

En tu visita a este pintoresco pueblito que conjuga grandes bellezas naturales y culturales, no debes dejar de visitar el Palacio Municipal que, además de su espléndida arquitectura, tiene en su interior un magnífico mural que resume los episodios más destacados de la historia del lugar. Y muy cerca de aquí se encuentra la Plaza del reloj donde hay una torre con un reloj en memoria de los mártires de la Revolución; reloj que por cierto fue programado con diferentes canciones para tocar cada hora, en Zacatlán de las Manzanas, Puebla.

Y siguiendo la travesía por Parras, sobre la punta del cerro de Sombreretillo, que se conoce así por sus semejanza con un sombrero, se ubica la Iglesia del Santo Madero que fue construida en 1868 y de la cual se dice que alberga una astilla de la cruz en la que crucificaron a Jesús; además desde este lugar tendrás una vista espectacular de toda la entidad.

También, casi al pie de este cerro se encuentra el Estanque de la Luz, un enorme reservorio de agua construido a mediados del siglo XIX alimentado de manantiales de la sierra y que hoy en día es un centro familiar en el cual se puede nadar y disfrutar de un asado en sus palapas.

Otro lugar que debes visitar es la Iglesia de San Ignacio de Loyola, construida en 1607 y en donde recientemente acaban de encontrar y rescatar entre sus paredes, murales del siglo XIX, ocultos detrás de viejas capas de pintura.

Un dato poco conocido de este sitio es que fue aquí donde, por invitación de su amigo parrense Don Evaristo Madero (abuelo de Francisco I. Madero), Thomas Alva Edison instaló una turbina hidroeléctrica para hacer pruebas en el perfeccionamiento de la bombilla eléctrica; lo que propició que Parras se convirtiera en el primer poblado en América Latina en contar con iluminación eléctrica.

En Parras también se encuentra la casa donde nació Francisco I. Madero y aunque actualmente es propiedad privada, aún puedes admirar este bello inmueble. Pero, hay un edificio que si puedes visitar, la Casona del Banco un lugar de finales del siglo XIX construido originalmente para albergar una sucursal del Banco de Nuevo León fundado por Don Evaristo Madero y socios pocos años antes.

En su rescate se han respetado las estructuras originales, por lo que, entre otras cosas, la mayoría de las puertas y ventanas, así como los herrajes son de aquella época. Pero sin lugar a dudas, uno de los tesoros más especiales de este sitio son las tres columnas de acero francesas fundidas por Gustave Eiffel, el mismo que construyó la famosa torre símbolo de Paris que lleva su nombre.

Por otra parte, por esta ocasión solo haremos mención de tres x (aunque Parras cuenta con una gran oferta al respecto) que son Casa Madero, las Bodegas Rivero González y Vinos Don Leo.

La vinícola más antigua de América, Casa Madero comenzó su tradición en 1568, cuando conquistadores españoles encontraron este oasis en medio del desierto, conozcamos más de ella:

En cuanto a las Bodegas Rivero González podemos decir que actualmente cuenta con dos líneas: Rivero González y Scielo. La primera es su marca emblema, está integrada por un tinto, rosado y blanco; éste último, tiene una característica muy especial: está elaborado de uva Cabernet Sauvignon y durante su producción se elimina todo el hollejo, lo que hace que el producto final no esté pigmentado.

El Rivero González tinto es elaborado con una mezcla bordelesa de uvas –Merlot, Cabernet Sauvignon y Cabernet Franc-, este vino tiene un reposo de 24 meses en barrica, por lo que adquiere un tono ocre y un sabor intenso y persistente a frutos rojos.

La línea Scielo, es la más accesible, pero mantiene los mismos estándares de calidad y está integrada principalmente por cuatro vinos monovarietales, tres tintos y un blanco, que abarca desde un fresco Chardonnay hasta un complejo Shiraz.

Por último, los vinos Don Leo ofrecen arte, historia y la esencia de una familia en cada una de sus botellas. Su historia inicia con Don Leo Mendel, originario de Linnich, Alemania, quien llega a México en 1938 empezando a laborar en el área agrícola donde inicio su amor y pasión por el campo.

El viñedo comenzó su primer plantación en el 2000 con una producción de una hectárea,  la cual a través del trabajo y esfuerzo a la fecha se ha multiplicado y logrado actualmente la producción de  45 hectáreas.

La cosecha es realizada a mano durante las horas más frías de la noche. Viñedos Don leo destila y fermenta a temperatura controlada con remontados para lograr una mayor concentración de aroma y color. Estos vinos se añejan por 14 meses en barricas de roble francés y americano, lo que les da el cuerpo, sabor y aroma característicos de un producto con excelente calidad, compitiendo en los principales mercados nacionales.

Vale la pena mencionar que estas casas vitivinícolas abren sus puertas al público para catas y recorridos previa reservación, así que no lo pienses más y visítalas. Y si viajas a Parras, no te preocupes por el hospedaje, ya que aquí hay una gran oferta hotelera para todos los bolsillos; pero en especial te recomendamos el Hotel Rincón de Montero y La Casona del Banco.

Ahora conozcamos Arteaga que se localiza al oriente de Saltillo y que sin duda, es el lugar ideal para la práctica de deportes al aire libre, como el ciclismo de montaña y el rappel.

Este lindo Pueblo Mágico que te recomendamos conocer caminando por sus tranquilas calles empedradas, debe su nombre a José María Arteaga, héroe liberal de la historia mexicana de mediados del siglo XIX y el cual alberga un precioso centro histórico en donde podrás admirar la Presidencia Municipal, una peculiar construcción edificada en 1868 de estilo Neoclásico; la Alameda Venustiano Carranza escenario de una gran variedad de eventos  artísticos y culturales.

También deberás conocer el Templo de San Isidro Labrador de Palomas, un maravilloso recinto construido en 1790 y el Museo de las Momias que resguarda varios cuerpos momificados encontrados en 1998 en perfectas condiciones gracias al fresco clima de la Sierra de Arteaga, además de diversos objetos y ropa típica de la Revolución Mexicana.

Y para consentir a tu paladar encontrarás numerosas tiendas que ofrecen los licores y conservas de frutas que han dado fama a este poblado, hechos con manzanas, duraznos, perones, entre otras especies, producidas en los numerosos campos de cultivo, huertos y hortalizas que se hallan en sus alrededores.

En especial te recomendamos la fábrica de dulces la Tiendita de Mariela que es atendida personalmente por sus fundadores Jesús Marte Valdés y Guillermina López Reyes. Y para disfrutar de una rica comida visita el restaurante bar “La Chavela” que cuenta con una gran variedad de platillos y bebidas que harán de tu estancia en Arteaga muy placentera.

De esta forma, nuestra visita por el Triángulo del Norte concluye con el Pueblo Mágico de Viesca fundado el 25 de julio de 1731 y cuyo origen se remonta a épocas de la colonia, cuando los españoles emigraron hacia tierras del norte de México en ese entonces lleno de manantiales y poblado por indios tlaxcaltecas quienes formaron parte de la estrategia para colonizar la entidad.

El acervo histórico de este pueblo comienza con el paso del Padre de la Patria Don Miguel Hidalgo en 1811, quien recorrió este lugar y poco después fue aprehendido en Acatita de Baján y conducido a Chihuahua para ser fusilado.

Viesca tiene como patrimonio la Casa Juárez, un edificio donde se estableció el gobierno legítimo de Benito Juárez del 27 de agosto al 4 de septiembre de 1864, con su República itinerante. Otro dato histórico del que fue participe este lugar es cuando aquí se registra el levantamiento armado magonista el 24 de junio de 1908 contra el régimen de Porfirio Díaz; evento, considerado como el movimiento emancipador y precursor de la Revolución Mexicana.

Entre sus atractivos destaca la Capilla de Santa Ana y la ex Hacienda de Hornos, que según registros datan de 1599, antes de la fundación oficial del municipio.

Respecto a su gastronomía típica podemos mencionar productos elaborados a base de dátil y nuez y las reliquias, elaboradas en hornos de adobe con madera de mezquite, por cierto no debes dejar de probar los “mamones” unos riquísimos panecillos rosados.

Mención aparte merece la estrella de Viesca “Las Dunas de Bilbao” que han sido escenario de diversas producciones cinematográficas, ya que son un enorme desierto de finas arenas que se dice eran parte del Mar de Tetis, cuya extensión es de 1.5 kilómetros de ancho por 3 kilómetros de largo y cuenta con interesantes especies únicas de flora y fauna como la lagartija de los arenales.

En las dunas también se pueden practicar actividades de ecoturismo como andar en cuatrimotos y practicar sandboarding, un deporte similar al snowboard, pero deslizándose en arena en lugar de nieve.

¿Sorprendido? Obviamente que sí, pues conocer estos rincones de nuestro bello México cautivan a cualquiera, por eso te recomendamos que visites Coahuila y descubras todo los secretos que guarda; y si visitas Viesca te recomendamos te hospedes en el Hotel Los Arcos.

Finalmente,  te compartimos una interesante entrevista con la Lic. Marisela Castro propietaria de la agencia de viajes Turimar, empresa con la cual te exhortamos a que realices el tour por el fascinante Triángulo del Norte:

A nombre del Periódico Opciones agradezco las facilidades otorgadas para realizar mi labor periodística, además de hacer mi estancia y viaje en Coahuila inolvidable al Ing. Luis Armando Álvarez de los Santos Director de Turismo de Torreón, Lic. Enrique Samariego Sifuentes Presidente de la OCV Torreón, Lic. Karina Ortiz CEO OCV Torreón, Lic. Gabriela Fernández Marrujo, Gerente de Marketing de la OCV Torreón, Isaac Hernández, Comunicación Social del Instituto Municipal del Deporte de Torreón, Lic. José Antonio Márquez, Presidente de la CANIRAC Delegación Laguna, Lic. Marisela Castro y Lic. Rogelio Ávila de Turimar, Gerardo Martínez, Guía de la Dirección de Turismo de Torreón, Mario Alberto Monjarás de León Cronista de Arteaga, Humberto Huerta Guía de Cuatro Cienegas, Enrique Ferriño, Irma Zamarrón de a OCV de Cuatro Cienegas, Bibiana Chapa de la OCV Saltillo, Lic. Lorenia Martínez directora de la OCV Parras, Marcelo Quirino, Presidente Municipal de Viesca, OCV y Secretaria de Turismo de Viesca y Lic. Manuel Jesús Castro López, Cronista, Guía de Viesca; C.P. Jesús Marte de la Tiendita de Mariela, Hotel Misión Torreón, Cuatro Ciénegas, Cyty Expres: Saltillo Torreón, Hotel Rincón de Montero, Bodega de vinos Vitali, Silvia Medina encargada de Bodegas Rivero González, vinos Don Leo, Casa Madero, Restaurante La Noria del hotel hostal El Farol, Mario A. Sánchez del Restaurante La Chavela, Hotel Los Arcos y Hotel Quinta Real Saltillo.

Por Bárbara Amador

Fotos Elsa G. Macías

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