Opciones Culturales A.C. realiza visita cultural al Antiguo Colegio de San Ildefonso con vecinos de la Alcaldía  Azcapotzalco

Con el objetivo de promover la cultura y la educación de nuestro país, así como fomentar la convivencia familiar; la asociación civil sin fines de lucro, Opciones Culturales junto con Ik To Cualli A.C.; realizaron el pasado 19 de junio una visita al Antiguo Colegio de San Ildefonso con personas de escasos recursos de las colonias San Rafael, Reynosa Tamaulipas y del Maestro a quienes se les transportó de forma gratuita desde sus colonias hasta el museo y viceversa.

Las niñas, niños, jóvenes y adultos, vecinos de la Alcaldía  Azcapotzalco pudieron disfrutar sin costo alguno de una visita guiada en la que conocieron la historia del inmueble y los murales del museo, considerado cuna del movimiento muralista mexicano, pues en sus muros se encuentra plasmada la obra de importantes artistas que marcaron el curso del siglo XX en México como Diego Rivera, Jean Charlot, Fernando Leal, David Alfaro Siqueiros, Ramón Alva y Fermín Revueltas.

Mención aparte merece José Clemente Orozco; quien trabajó en San Idelfonso de 1923 a 1926, periodo en el que pintó los muros norte de los tres pisos del Patio Principal, así como los del primer descanso del cubo de la escalera. Mientras que entre 1930 y 1942, Fernando Leal realizó la obra Epopeya bolivariana en el vestíbulo del Anfiteatro.

 

Otros de los lugares que se visitaron como parte del recorrido fueron el Anfiteatro, el Generalito, la Capilla y la Sacristía. El primero se creó a principios del siglo XX con la intención de ampliar las instalaciones de la Escuela Nacional Preparatoria. El Anfiteatro, llamado entonces únicamente “de la Preparatoria”, quedó concluido en 1910, y el 22 de septiembre del mismo año fue sede de la inauguración de la Universidad Nacional de México, en el marco de la celebración del primer Centenario de la Independencia.

El inicio de la Revolución detuvo temporalmente la construcción del resto del anexo y no fue sino hasta 1931 cuando se concluyó el proyecto original.

En 1922, Diego Rivera pintó en el anfiteatro su primer mural llamado La Creación, en referencia a la creación científica y artística. Una composición con marcada influencia bizantina donde convergen las cualidades estéticas de Rivera y las filosóficas alentadas por el pensamiento de José Vasconcelos. En 1930, al conmemorarse cien años de la muerte de Simón Bolívar, el Anfiteatro recibió su nombre.

El Generalito nombrado así para distinguirlo del Salón General de la Real y Pontificia Universidad de México, que era de mayor jerarquía; alberga los sitiales que pertenecieron al coro del templo de San Agustín de la Ciudad de México. Esta sillería es obra del taller del maestro ensamblador Salvador de Ocampo (ca. 1665-1732) y constituye uno de los principales ejemplos de escultura novohispana del barroco. Sus respaldos muestran bellísimas tallas que narran pasajes bíblicos, recreando imágenes tomadas muy probablemente de los grabados de una biblia francesa del siglo XVII.

La Capilla del Antiguo Colegio de San Ildefonso fue inaugurada en diciembre de 1739. Su decoración lucía un coro con su órgano, seis retablos barrocos, esculturas y pinturas de santos, reliquias y objetos litúrgicos de metales preciosos. Este acervo se perdió gradualmente tras la expulsión de los jesuitas y la posterior instalación de la biblioteca de la Escuela Nacional Preparatoria. Hoy en día, la capilla es sólo el majestuoso espacio arquitectónico que se utiliza como una sala para exposiciones.

La Sacristía que se ubica en la planta baja, estuvo ricamente ornamentada con muebles de finas maderas, una pila para agua y cuadros de diversos santos realizados por algunos de los más notables pintores de la primera mitad del siglo XVIII como José de Ibarra (ca. 1700-1756) y Francisco Martínez (activo entre 1723 y 1758). Hoy en día sólo se pueden admirar dos grandes lienzos que fueron pintados alrededor de 1761 por Francisco Antonio Vallejo (ca. 1722-1785). El que se ubica en el muro sur representa la venida del Espíritu Santo y el del muro oriente a la Sagrada Familia.

Un poco de historia…

Los orígenes del Antiguo Colegio de San Ildefonso datan desde que los jesuitas iniciaron su labor educativa en la capital novohispana con la sucesiva fundación del Colegio Máximo de San Pedro y San Pablo y cuatro seminarios: San Pedro y San Pablo, San Bernardo, San Miguel y San Gregorio.

De la fusión de los tres últimos nació, en 1583, el Colegio de San Ildefonso, para que todos los colegiales de la Congregación residieran en una institución bajo la tutela de un sólo rector. El nombre de San Ildefonso le fue dado en honor al Santo Arzobispo de Toledo, cuya devoción lo llevó a escribir en defensa de la limpia concepción de la Virgen María, dogma que la Compañía de Jesús ha sostenido desde su fundación. Hacia 1618 empezó a funcionar bajo el Patronato Real otorgado por Felipe III, estableciéndose así el Real y más Antiguo Colegio de San Ildefonso.

Gracias al auge económico del virreinato y al poder financiero de la Compañía de Jesús, el inmueble fue reedificado en las primeras cuatro décadas del siglo XVIII, dando paso al inmueble que hoy conocemos y que es uno de los ejemplos barrocos más sobresalientes de la arquitectura civil de la Ciudad de México.

Tras la expulsión de los jesuitas, decretada por el rey Carlos III en 1767, el edificio tuvo diversas funciones: cuartel de un batallón del Regimiento de Flandes, colegio administrado por el gobierno virreinal y dirigido por el clero secular, sede temporal de la Escuela de Jurisprudencia, de algunas cátedras de la Escuela de Medicina y cuartel de las tropas norteamericanas y francesas en 1847 y 1862, respectivamente.

En 1867, el gobierno de Benito Juárez emprendió una reforma en el campo de la educación y sus instituciones. La Ley Orgánica de Instrucción Pública creó la Escuela Nacional Preparatoria, que se estableció en el edificio del Colegio de San Ildefonso. Su primer director fue el doctor Gabino Barreda (1818-1881), quien llevó a cabo un innovador plan de estudios con base en los principios de la filosofía positivista de Augusto Comte.

En 1910, la Escuela Nacional Preparatoria pasó a formar parte de la Universidad Nacional fundada por Justo Sierra. Durante más de seis décadas continuó siendo la cuna de varias generaciones de intelectuales y destacadas personalidades. A la salida de su última generación (1978-1980), el inmueble dejó de ser sede del Plantel Número 1 de la Escuela Nacional Preparatoria.

El edificio permaneció cerrado al público hasta 1992, cuando fue restaurado para albergar la exposición México, Esplendores de 30 Siglos. Desde esa fecha, el Antiguo Colegio de San Ildefonso es administrado por un mandato tripartita integrado por la Universidad Nacional Autónoma de México, la Secretaría de Cultura (entonces Consejo Nacional para la Cultura y las Artes) y el Gobierno de la Ciudad de México.

¿Interesante? Pues no dejes de visitarlo y conocer todos los secretos que alberga este hermoso inmueble; mientras tanto, te recomendamos hacer un recorrido virtual en: www.sanildefonso.org.mx/museo-digital/2017/2017/acsi.html

Y si quieres conocer más acerca del trabajo que realiza Opciones Culturales A.C. en pro de las niñas, niños y jóvenes de México, te invitamos a que visites su página de internet: www.periodicoopciones.com y los sigas en sus redes sociales:       Twitter :Opciones00, Facebook: PeriodicoOpciones e Instagram: periodicoopciones

Por Bárbara Amador

Fotos Elsa Godoy

Con información del Antiguo Colegio de San Ildefonso